postal superficial: Goteborg.Suecia.
Las langostas suecas no ven ni oyen mucho, pero si tienen un sentido del tacto exquisito, facilitado por cientos de miles de pelitos diminutos que les sobresalen a través del caparazón. La langosta sueca, aunque encerrada en lo que parece una armadura sólida e impenetrable, puede recibir estímulos e impresiones del exterior con tanta facilidad como si poseyera una piel blanda y delicada,…ahhhh..la langosta sueca….L.I.B. Octubre 2008